“El campo decisivo de acción será el aéreo”. Con esas palabras el general italiano Giulio Douhet profetizaba en su obra El Dominio del Aire la importancia que jugaría la aviación en la guerra moderna. Este oficial fue uno de los pocos que vio el potencial de la Fuerza Aérea al acabar la Primera Guerra Mundial. Desde que Douhet escribió esas palabras en la década de 1920, el dominio de los cielos se ha convertido en una de las grandes prioridades de los ejércitos modernos. La importancia de obtener y conservar la supremacía aérea se ha demostrado clave en numerosos conflictos y las grandes potencias han competido sin parar por tener los mejores cazas a su disposición. En la actualidad la carrera continúa y ya hay varios programas en marcha para crear el caza de sexta generación.
En este artículo no se hablará de las cualidades o características de los cazas de sexta generación. Sin duda, ya hay bastantes análisis donde se tratan esos temas y muchos más irán surgiendo a medida que avance la competición en este ámbito y se conozcan más datos. Además, mucha de la información más relevante sigue siendo confidencial, ya que ningún país quiere revelar sus secretos tecnológico-militares a posibles rivales. Este artículo, por tanto, se centrará en explicar la intensa carrera que se ha gestado, las alianzas que se han formado y los países que están compitiendo para hacerse con el caza del futuro.
Estados Unidos lidera la carrera
No resulta extraño que Estados Unidos sea uno de los principales competidores. De hecho, a día de hoy, es el país que más probabilidades tiene de ser el primero en obtener el caza. Con su posición como hegemón mundial siendo amenazada por China y con un poderoso complejo industrial-militar, Washington no ha lanzado un programa de caza de sexta generación, ha planificado dos: el programa NGAD para la Fuerzas Aérea y el programa F/A-XX para la Armada. No hay demasiada información disponible de ninguno de las dos iniciativas por razones de seguridad, pero sí se conoce que se están invirtiendo grandes cantidades de recursos para desarrollar y empezar a producir estos cazas cuanto antes.
Todo apunta a que Estados Unidos está enfocándose especialmente en el programa F/A-XX y que la Armada le ha dado prioridad absoluta por dos razones fundamentales. En primer lugar, los cazas F-18 de la Armada se acercan rápidamente al fin de su vida útil y necesitan reemplazos cuanto antes. En segundo lugar, el nuevo enfoque estratégico estadounidense le da prioridad al teatro del Pacífico y a un eventual enfrentamiento con China, conflicto en el que la Armada y sus alas embarcadas jugarían un papel fundamental al tratarse de un escenario caracterizado por ser un gran océano lleno de islas. Se espera que ambos cazas empiecen a entrar en servicio en la década de 2030.
El lento avance del FCAS europeo
El FCAS es el caza de sexta generación que está siendo desarrollado en la Unión Europea por una alianza compuesta por tres países: España, Francia y Alemania. Sobre el papel el programa resulta muy atractivo para Europa, ya que consiste en crear un avión de guerra 100% europeo. Sin duda, este es uno de los grandes proyectos de la industria de defensa europea, como lo fue y sigue siendo el Eurofighter.
No obstante, en la práctica, esta iniciativa no está en condiciones de competir con otros rivales debido a la constante rivalidad que se está produciendo entre dos de las empresas participantes. Airbus, respaldada por Alemania, y Dassault, apoyada por Francia, han estado enfrentándose durante meses por el liderazgo. Ambas tienen décadas de experiencia en el campo de la aviación militar y ambas quieren dirigir el programa.
Aunque de momento las dos compañías parecen haber llegado a un acuerdo, las discrepancias han provocado la paralización del programa durante meses. Como consecuencia, se espera que en el mejor de los casos comenzará a entrar en servicio en la década de 2040, diez años más tarde de lo que se prevé para los cazas de sexta generación norteamericanos. Esta, sin embargo, es la estimación más optimista. Eric Trappier, consejero delegado de la empresa francesa Dassault, ya afirmó que con los retrasos sufridos lo más probable es que el caza esté operativo en la década de 2050.
Si bien el desarrollo del FCAS sigue adelante, habrá que esperar para ver cómo de perjudicado se ha visto por culpa de las rivalidades internas. Es innegable que otros competidores ya han conseguido una importante ventaja temporal sobre el FCAS. Aun así, abril de 2023 ha visto importantes avances en el programa, ya que España, Alemania y Francia han firmado al fin el primer contrato del FCAS y han abierto el programa a nuevos socios en un intento de acelerar los tiempos.
La sorpresa del caza euro-nipón
Contra todo pronóstico Japón, Italia y Gran Bretaña se han aliado para producir su propio caza de sexta generación: el Global Combat Air Programme (GCAP). Este avión de combate fue anunciado a finales de 2022 y fue una sorpresa ya que tanto Reino Unido como Italia usan el Eurofighter al que se supone que va a sustituir el FCAS. Este nuevo proyecto es especialmente interesante por dos razones fundamentales.
En primer lugar, refleja la división que existe entre los países europeos: Roma y Londres han preferido crear su propio avión de guerra antes que sumarse al FCAS. Es muy posible que los enfrentamientos entre Airbus y Dassault y el consiguiente retraso que ha sufrido haya sido un factor de peso para que los italianos y los británicos hayan decidido lanzar su propio programa.
En segundo lugar, la participación de Japón evidencia el cambio de mentalidad que ha experimentado la estrategia de seguridad nipona ante el auge de China y la amenaza que supone el desarrollo militar de Corea del Norte. Frente a un país que durante décadas había rechazado cualquier intento de militarización –en parte limitado por su propia Constitución, que renuncia al uso de la fuerza–, ahora Tokio participa en ambiciosos programas enfocados en la fabricación de sistemas avanzados de armamento como el GCAP. Cabe recordar que Japón está inmerso en un gran plan de rearme que busca doblar su presupuesto de defensa para 2028 y adquirir “capacidades de contraataque” para golpear territorio enemigo en caso de que fuera necesario.
El MIG-41, el caza de sexta generación de Rusia
Como no podía ser de otra forma, Rusia también está inmersa en la carrera por el caza de sexta generación. La legendaria empresa Mikoyan Gurevich se ha lanzado a producir el MIG-41, que será el caza de sexta generación que deberá sustituir a los actuales MIG-31. La corporación Rostec, propietaria de Mikoyan, anunció en 2021 que su MIG-41 ya había entrado en la fase de desarrollo. En principio se espera que el caza estará listo en la década de 2030.
Es muy probable que las sanciones impuestas a Moscú a raíz de la guerra de Ucrania afecten al programa de desarrollo del MIG-41 puesto que Rusia tiene una gran dependencia de la exportación en el campo de la microelectrónica. No obstante, tal y como reportaba el medio suizo Swissinfo, se han encontrando componentes occidentales en los sistemas de armas rusos, así que existe la posibilidad de que el Kremlin haya sido capaz de esquivar, al menos en parte, las sanciones occidentales. Tampoco debería ignorarse que Rusia podría recurrir a China para adquirir los componentes electrónicos necesarios para producir su caza de sexta generación.
El dragón asiático
La principal rival de Estados Unidos no iba a quedarse atrás en esta vital competición para asegurar el dominio del aire. China presentó en 2022 su concepto de caza de sexta generación. Curiosamente, este programa guardaba ciertas similitudes con el NGAD estadounidense. A pesar de todo, no se sabe demasiado del caza de sexta generación chino.
Realmente a nadie le debería sorprender que Pekín sea uno de los grandes competidores en esta carrera, sobre todo si se tiene en cuenta la rivalidad declarada que el país mantiene con Estados Unidos. Sin duda, el gigante asiático tiene los ojos puestos en Taiwán y tener un caza de sexta generación es imprescindible para que pueda desafíar abiertamente a la mayor potencia militar del planeta en caso de que decida participar directamente en un hipotético conflicto para apoyar a Taipéi.
Los resultados de la carrera
Aunque la carrera por el caza de sexta generación está en pleno apogeo y a años de terminar, ya se pueden empezar a extraer conclusiones.
Si algo ha reflejado esta competición es la debilidad de la industria europea. Ningún país europeo, excluyendo a Rusia, ha sido capaz de lanzar un programa en solitario, lo que les ha obligado a formar alianzas para producir el caza del futuro. Pero esas alianzas también han puesto de relieve la gran división que existe en Europa y las dificultades de intentar desarrollar proyectos europeos de armamento. El FCAS de Airbus tenía buenas expectativas, pero el enfrentamiento entre alemanes y franceses ha sido un duro golpe ya que se ha supuesto la pérdida un tiempo precioso. Es muy difícil crear una industria de defensa europea cuando los principales países del continente no paran de rivalizar entre sí. Por si no era suficiente, Italia y Gran Bretaña han decidido formar su propio proyecto y han buscado socios de fuera del Viejo Continente.
Por su parte, queda bien reflejado como Japón ve el auge y rearme de China, así como el programa nuclear de Corea del Norte, como una amenaza directa. El país nipón ambiciona el caza de sexta generación para poder contrarrestar a sus poderosos vecinos. Si algo ha dejado claro la carrera en este sector es que Tokio tiene la voluntad de volver a convertirse en una potencia militar de primer nivel. Como última lección puede verse que los tres grandes países, Rusia, China y Estados Unidos, son los únicos que realmente tienen una industria lo suficientemente potente como para lanzar programas de esta envergadura en solitario. De entre los tres, el complejo militar-industrial estadounidense ha vuelto a demostrar su superioridad, desarrollando dos programas de caza de sexta generación a la vez.
Suscríbete y accede a los nuevos Artículos Exclusivos desde 3,99€
Si escoges nuestro plan DLG Premium anual tendrás también acceso a todos los seminarios de Descifrando la Guerra, incluyendo directos y grabaciones.
Apúntate a nuestra newsletter
Te enviaremos cada semana una selección de los artículos más destacados, para que no te pierdas nada.