El Tribunal Supremo de Grecia prohíbe al partido Griegos por la Patria participar en las elecciones generales del próximo 21 de mayo por ser “una continuación” de Amanecer Dorado, una formación política neonazi ilegalizada en 2020 por operar como una organización criminal.
La exclusión viene amparada por dos leyes que el parlamento griego aprobó en febrero y abril del presente año. La primera impide concurrir en unos comicios a los partidos que son liderados por individuos condenados por delitos graves –como pertenencia a grupos criminales o terroristas– o que supongan un obstáculo para el “libre funcionamiento de la democracia constitucional”.
Ilías Kasidiaris, exdiputado de Amanecer Dorado y fundador de Griegos por la Patria, actualmente en prisión por dirección de banda criminal, traspasó el liderazgo de la formación al exmilitar Dimitris Chatziliadis con el objetivo de sortear el veto. Como respuesta, el parlamento griego adoptó una nueva legislación para ampliar el alcance de la prohibición e impedir que partidos de orientación neonazi se postulen en los comicios. Kasidiaris calificó la medida como una “abominación” y aseguró que sería contraproducente porque “despertará a millones de ciudadanos griegos que están de nuestro lado”.
El Tribunal Supremo debía pronunciarse para hacer efectiva la denegación. Tras la sesión celebrada el 2 de mayo, la corte dictaminó que el cambio en el liderazgo no es suficiente al considerar que Kasidiaris continúa siendo el cabecilla “real” de la organización. Asimismo, afirma que Griegos por la Patria sigue teniendo una fuerte vinculación con Amanecer Dorado ya que entre sus listas se incluían diversos exmiembros del partido neonazi. El ejecutivo helénico ha bautizado el fallo como una “decisión histórica” que imposibilita que los “enemigos de la democracia” tengan voz en el parlamento. La abogada de Kasidiaris, por su parte, ha criticado el movimiento asegurando que el “gobierno democrático ha sido finalmente derrocado”.
Las encuestas concedían a Griegos por la Patria un 4% de los votos, superando el umbral del 3% necesario para poder optar a una representación parlamentaria. En este contexto, Alexis Tsipras, líder del principal partido de la oposición, la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA), ha acusado al primer ministro Kyriakos Mitsotakis de intentar atraer los votos de los simpatizantes de los partidos de extrema derecha. Quien podría capitalizar esta prohibición es EAN, una formación de extrema derecha fundada por Anastasios Kanellopoulos que sí ha recibido la autorización del Tribunal Supremo.
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